Una nueva promoción de profesionales finaliza sus estudios

El pasado viernes 7 de junio, nuestro colegio celebró la esperada ceremonia de graduación de los alumnos de Formación Profesional, en una jornada llena de momentos significativos y emotivos que quedarán grabados en la memoria de todos los asistentes.

La celebración comenzó en el teatro del colegio, donde se dieron cita estudiantes, familiares y personal docente. La apertura del acto estuvo a cargo del jefe de estudios, Don Ángel Naranjo, quien en su discurso destacó la importancia de aquellos que han formado parte en la formación de los alumnos y de un valor en concreto, la paciencia. En sus palabras, les animaba a ser buenos profesionales, poniendo en práctica lo aprendido y desarrollando todo cuanto en casa y en el colegio se les ha enseñado. Seguidamente, la alumna Lucía Beato tomó la palabra para expresar en nombre de sus compañeros el profundo agradecimiento hacia los profesores y el apoyo incondicional de sus familias, recordando anécdotas y experiencias vividas durante estos años, partiendo desde su propia experiencia y de cómo estos años, como a muchos, ha transformado enormemente.

La primera parte de la ceremonia culminó con la entrega de premios y distinciones, así como las becas de graduados. Los directores del centro, Don Julio Vera y el titular, D. Francisco José Pérez Camacho (sacerdote), fueron los encargados de otorgar estos reconocimientos. Cada alumno subió al escenario para recibir su diploma en medio de aplausos y felicitaciones, celebrando así el cierre de un ciclo académico importante.

La jornada continuó en la Iglesia del colegio, a los pies de María Auxiliadora, donde se llevó a cabo una solemne ceremonia de acción de gracias. En este momento, los estudiantes recibieron la insignia de antiguos alumnos, símbolo de pertenencia y unión con la comunidad salesiana, recordándoles que siempre tendrán un hogar entre nuestras paredes. Esta ceremonia estuvo impregnada de espiritualidad y reflexión, reforzando los valores éticos y espirituales que han sido una parte integral de su educación. Don Francisco José Pérez Camacho cerró con un mensaje inspirador, animando a los graduados a enfrentar el futuro con valentía y confianza, aplicando los valores y conocimientos adquiridos durante su formación. Sus palabras resonaron como un recordatorio del compromiso del colegio con la educación integral de sus estudiantes.

El día culminó con una cena de convivencia en la que participaron los graduados, sus familias y profesores. Este encuentro fue una oportunidad para compartir anécdotas, expresar gratitud y disfrutar de un ambiente distendido y festivo.

La ceremonia de graduación de este año fue un fiel reflejo del espíritu salesiano, combinando la celebración académica con la reflexión espiritual y la convivencia comunitaria. El colegio Salesianos Triana se despide así de una generación de jóvenes preparados para enfrentar nuevos desafíos, deseándoles el mayor de los éxitos en sus futuros proyectos y recordándoles que siempre serán parte de esta gran familia.