Una nueva promoción de Ciclos Formativos se despidió de nuestra casa el pasado día 19 de junio, en un emotivo acto que contó con la presencia del presidente del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos, Javier Gómez Ramallo.
En una calurosa tarde y con un teatro abarrotado por nuestro alumnado y sus familiares, tuvo lugar el tradicional acto de despedida de la promoción 2017/19 de Ciclos Formativos de Grado Medio y Superior. Fue un acto que contó con numerosas intervenciones y con las habituales distinciones a los alumnos más destacados. Tras él, la atención se trasladó a la Iglesia del colegio donde con una Celebración de la Palabra se tuvo un gesto de acción de gracias por el Grado terminado para, finalmente, tener una cena de convivencia de toda la comunidad educativa.
El agradecimiento al profesorado y a los compañeros
El acto fue presentado por don Ángel Naranjo, jefe de estudios de la etapa, que trazando una línea del tiempo va dando paso a cada uno de los intervinientes. La primera en tomar la palabra fue Clara Torreño Ruiz, alumna del Ciclo Formativo de Grado Medio de Actividades Comerciales.
Nuestra alumna Clara habló en nombre de todos sus compañeros y compañeras. En un discurso emotivo en el que repasó la trayectoria vivida en nuestra Casa hasta llegar al día de hoy, tuvo ocasión para reconocer y agradecer al profesorado y a toda la casa en general por todo lo recibido. Pero las palabras más cargadas de emotividad fueron las que dedicó a recordar el mes de enero en nuestra casa: los nervios de una clase unida por los preparativos de los Playbacks, el recuerdo a Don Bosco, el padre de los jóvenes que da oportunidades a quien nunca las tiene.
Tras las palabras de la alumna llegó el momento de la imposición de orlas a todos los graduados y de la entrega de los diplomas. Los premios a los Valores Humanos, otorgados por el alumnado mediante votación, recayeron en Pablo Moreno Viñas (Gestión Administrativa), Enrique Tomelloso Moreno (Actividades Comerciales), Francisco De Blas Terrón (Instalaciones Eléctricas y Automáticas), José Carlos Asián Martínez (Instalaciones de Telecomunicación), Manuel León Mejías (Administración y Finanzas) y José David Polonio Domínguez (Desarrollo de Aplicaciones Multiplataforma). Por otro lado, los Premios Excelentísimos Condes de Bustillo a la Actitud y el Trabajo fueron otorgados por el profesorado a Carmen Andrea Zambrano Manzano (Gestión Administrativa), José Rioja Roballo (Actividades Comerciales), Pablo Gómez Matías (Instalaciones Eléctricas y Automáticas), Juan Moreno Escobar (Instalaciones de Telecomunicaciones), Fernando José Vadillo Laguna (Administración y Finanzas) y Juan Antonio Ortiz Guerra (Desarrollo de Aplicaciones Multiplataforma). Además, se entregaron los diplomas a los alumnos que han realizado prácticas Erasmus, con reconocimiento de la movilidad realizada y el suplemento al título con traducción al inglés.
Las ventajas de ser alumnos salesianos
Tras los reconocimientos llegó el momento de la última lección magistral por parte de don Javier Gómez Ramallo, presidente del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Sevilla. Pero antes de dicha charla don Julio Vera, director de centro, presentó al ponente con la cordialidad que le da el haber compartido aulas en nuestra Casa.
Don Javier comenzó recordando sus tiempos de alumno de la casa y a partir de ahí trazó las líneas que marcan las características del antiguo alumno salesiano, cosa que ya comparte con los alumnos a los que se dirigía, por lo que en todo momento se refirió a ellos como “compañeros”. Así, resaltó algunos de los valores humanos que en nuestra casa se adquieren, como la generosidad, a la que se refirió en estos términos: “Estudiar en los salesianos te lleva a extender una gran generosidad humana que solo puedes ponderar cuando la recibes”. También resaltó la valentía con la que los alumnos afrontaron la decisión de estudiar un ciclo formativo, decisión que ahora tendrán que repetir al elegir si seguir formándose o integrarse en el mercado laboral. En el caso de elegir esto último, nuestros alumnos están de suerte, ya que el mercado laboral demanda antiguos alumnos salesianos: personas responsables, comprometidas, generosas, con ilusión, etc.
La experiencia vivida en la casa
Tras las palabras de don Javier, el turno de palabra le llegó a don Fernando Báñez, director titular de la casa, para clausurar el curso. Sus palabras giraron en torno a la forma que tenemos de aprovechar el tiempo y valorar las experiencias de nuestra vida. Las experiencias se forman de encuentros que provocan cambios que permanecen en el tiempo. Por eso don Fernando animó a los alumnos a analizar su paso por el colegio desde esta perspectiva, para poder decir que realmente vivieron una experiencia en nuestro colegio que le llevó a ser un poco más felices.
Acción de gracias
Tras finalizar el acto académico, toda la comunidad educativa se trasladó a la iglesia para la Celebración de Acción de Gracias. En ella, las lecturas giraron en torno a los frutos obtenidos del trabajo cuando Dios se hace presente en él. La acción de gracias estuvo marcada por un gesto muy didáctico sobre el logotipo que nos representa a todos los salesianos del mundo: la casa en la que Don Bosco, a través del personal de la casa, acoge a todos los jóvenes y alumnos. Así, el logotipo fue construido poco a poco por padres, alumnos, profesores y salesianos, y cada uno de ellos fue dando gracias y pidiendo perdón por los errores.
Una vez finalizada la Celebración se impusieron las insignias de Antiguos Alumnos y se realizó la foto oficial de familia. Tras esto, la noche se prolongó hasta bien entrada la madrugada en una agradable cena de convivencia entre profesorado, familias y alumnado que se culminó a los postres con un original vídeo preparado por todo el claustro de la etapa.
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